Las gafas violeta

Siempre me he considerado feminista, no cabía otra opción. No en el mundo en el que vivimos, no siendo hija del patriarcado.

El problema surge cuando algo que pasa en tu vida (no necesariamente a ti, sino al mundo que te rodea), tambalea y hace caer todos tus esquemas.

No voy a hablar de lo que ha pasado en mi entorno, no creo que sea necesario, pero fue un revulsivo.

Me hizo darme cuenta de que hay que seguir luchando, hay que reeducarse y hay que ponerse "las gafas violetas" y, amigues, una vez puestas ya no hay marcha atrás. 

Cuando te las pones, te replanteas todos tus esquemas vitales, éticos, de comportamiento, hasta la forma en la que hablas. TODO tiene que cambiar.

Todavía hay pensamientos, comportamientos y formas de entender la vida muy influenciados por el patriarcado y la sociedad en la que vivimos. Hace poco, en una conversación con mi marido y un amigo, me di cuenta del largo camino que me queda por delante.  Por suerte, gracias a amigues, conocides, un pensamiento mas critico y muchas lecturas de referencia creo que, paso a paso, cada dia estoy un poco más cerca.  

Y esta mañana, sin ir más lejos, una amiga me ha hecho darme cuenta de que, pese a todo, sigo estando influenciada por el machismo y el sexismo. ¿Esta mal que me haga gracia un texto de una escritora porque cosifica a cierto tipo de hombres? ¿Veo este hecho tan natural (al haber estado sometida a la cosificación toda mi vida) que hace que no me "chirríen" este tipo de comportamientos? ¿Soy menos feminista por ello? ¿Puedo seguir pensando , y opinando, que un tio esta "bueno"?

Pongamos que el texto hubiera sido a la inversa, un escritor hablando de mujeres. ¿Me habría hecho la misma gracia? Lo dudo mucho. 

No puedo sino revolverme y maldecirme por esta dualidad en la que me veo inmersa: luchar para "desaprender" todo lo aprendido y seguir siendo yo. ¿Dónde está el término medio y como se llega a él?

Abro debate... Ahora la pelota está en vuestro tejado.